Grupo de Empresas en Formación Programada

Un grupo de empresas es un conglomerado empresarial formado por entidades que consolidan los balances contables, disponen de una dirección efectiva común o estén formados por filiales de una misma matriz. Según el Código de Comercio estas empresas están obligadas a presentar las cuentas anuales consolidadas y el informe de gestión consolidados, aunque la obligación de formular estas cuentas o informe, no exime a las sociedades integrantes del grupo de aportar sus propias cuentas anuales.

La Fundación Tripartita indica que próximamente se habilitará en el aplicativo una opción para anexar la documentación que acredite esta condición, ya que “en el caso de grupo de empresas, cualquiera de las empresas del grupo podrá organizar la formación de los trabajadores del grupo por sí misma, así como impartir la formación empleando para ello medios propios o bien recurriendo a su contratación”.

Las empresas que acrediten documentalmente ante la Fundación Tripartita su condición de grupo de empresas, no es necesario que estén acreditadas ni inscritas, y deberán tener en cuenta que a partir del 24 de marzo una de las empresas del grupo puede ser la impartidora. Como la organización de la formación se realizará por una de las empresas del grupo y no por una entidad externa, los costes de formación que se podrán imputar son:
– Costes Directos
– Costes Indirectos

Por lo tanto en los grupos de empresas, a partir del 24 de marzo no se puede imputar ningún coste de organización, por ello si se ha señalado alguna cantidad en el apartado de organización, la Fundación lo ajustará a 0 euros. Esta actuación parece que va en una línea distinta a lo indicado en el artículo 10.4 del RDL 4/2015 donde se establece que en caso de pertenecer a un grupo de empresas, cada empresa podrá disponer del importe del crédito que corresponda al grupo, con el límite del 100% de lo cotizado por cada una de ellas en concepto de formación profesional. Lo establecido en este párrafo se podrá en efectos a partir del 1 de enero 2016. En definitiva, otro aspecto confuso más de la nueva norma.